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Los rebeldes de la República Democrática del Congo (RDC) del movimiento M23 confirmaron el control de la ciudad de Goma, la capital de la provincia de Kivu del Norte, en el noreste del país, con la llegada a la localidad de su jefe, el general Sultani Makenga, afirmaron testigos presenciales.

"Se puede ver a los rebeldes en las principales calles de la ciudad a bordo de todoterrenos, que son observados por la población de Goma con reticencia", señaló el periodista independiente Dacruz Rugeri, contactado telefónicamente por Efe desde Kinshasa.

Pocas horas después del control de la capital del Norte Kivu, llegó a la ciudad el general Makenga, jefe del Ejército Revolucionario Congoleño (ARC) -el nuevo nombre que se ha dado el grupo rebelde M23- que entró en Goma protegido por sus escoltas y recorrió sus principales calles.

"La ciudad está prácticamente vacía, no se ve actividad. Los soldados de las Fuerzas Armadas de la RDC (FARDC) y los policías se dieron a la fuga y dejaron la zona libre a los rebeldes del M23, que iban vestidos del uniforme del Ejército ruandés", aseguró un habitante que solicitó el anonimato.

Recientemente nombrado general de brigada, Makenga era hasta hace poco coronel y jefe de las operaciones de las FARDC en la región de Kivu del Sur, pero desertó del Ejército congoleño junto con otros altos cargos y numerosos soldados para apoyar la creación del M23 en abril pasado.

En ese momento, Makenga fue uno de los altos cargos de las FARDC que impulsó esta rebelión, protagonizada por militares tutsis antiguos miembros de la guerrilla Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), los cuales fueron integrados en las filas del Ejército congoleño en 2009 como parte de un acuerdo para pacificar la zona.

Goma cayó hoy en manos de los rebeldes del M23 tras varios días de combates en las cercanías de la urbe entre los insurgentes y las FARDC, apoyadas por la Misión de la ONU en el país (MONUSCO) y milicias locales.

Testigos citados por Radio Okapi, emisora promovida por la MONUSCO, aseguraron que las fuerzas gubernamentales abandonaron Goma en dirección a la localidad de Sake, a unos 27 kilómetros, tras intentar repeler la ofensiva de los rebeldes.

El portavoz del Gobierno congoleño, Lambert Mende, alegó que se trata de un repliegue estratégico de las FARDC y subrayó que el Ejército no se da por vencido: "Lucharemos -aseveró- hasta derramar la última gota de sangre".

Por otra parte, según fuentes administrativas, el gobernador de la provincia de Kivu del Norte, Julien Paluku, se encuentra ahora en la localidad de Bukavu tras refugiarse ayer en el cuartel general de la MONUSCO en Goma.

La ONU acusa a los gobiernos de Ruanda y de Uganda de apoyar a los rebeldes, pero ambos países desmiente cualquier vínculo con el M23.
El M23 lo forman un grupo de soldados congoleños amotinados y fieles al rebelde Bosco Ntaganda, buscado por la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de guerra y contra la humanidad.

Los rebeldes se sublevaron el pasado abril para protestar por la pérdida de poder que había impuesto el Ejecutivo de Kinshasa a su líder, y reclaman nuevas negociaciones con el Gobierno. La RDC está inmersa aún en un frágil proceso de paz tras la segunda guerra del Congo (1998-2003), que implicó a varios países africanos, y tiene desplegada la mayor misión de paz de la ONU.

20-XI-12, efe, lavanguardia