´La Europa de las lenguas Estado´, Magí Camps

En Bruselas, mi amigo Ricardo, madrileño, se entiende en francés con su mujer belga y con sus hijos, mientras que entre ellos y con su madre se expresan en flamenco. Los críos aprenden inglés en la escuela y, como visitan cada año a los abuelos paternos, chapurrean el castellano. Los cuatro también hablan italiano porque Ricardo y su mujer son eurofuncionarios y residieron diez años en Milán. Un ejemplo de la Europa multilingüe.

El viernes se celebró el día europeo de las Lenguas, impulsado por la UE. No es de extrañar que una institución que acoge una veintena larga de lenguas estatales impulse jornadas en las que se reflexione sobre el multilingüismo. La representación en Barcelona de la Comisión Europea convocó la interesante mesa redonda "Las lenguas, un beneficio para la economía".

Estos beneficios comerciales, al margen de los propios que produce la enseñanza de idiomas y los servicios de interpretación y traducción, se resumen en una idea: al cliente hay que hablarle en su idioma. En ello coincidieron los intervinientes, representantes de instituciones comerciales de Francia, Alemania, Portugal e Italia. Es decir, a pesar del reconocimiento del inglés como lingua franca, el cliente, que siempre tiene la razón, quiere que le hablen en su propia lengua.

Antoni Mir, director de la Casa de les Llengües, actuó de moderador e Isidor Marí, director de la cátedra Lingua Món (UOC), hizo hincapié en el documento comunitario sobre los activos del multilingüismo en Europa, cuyo objetivo es "concienciar a la población sobre el valor y las oportunidades que representa la diversidad lingüística de laUEy animar a eliminar las barreras para el diálogo intercultural". La clave reside en el trilingüismo, es decir, el conocimiento de dos lenguas además de la materna, señala el texto.

Yme asalta la duda: a los catalanohablantes, que también hablamos castellano, ¿nos cuenta el catalán? ¿O tenemos que aprender una cuarta lengua? La pregunta no es baladí, porque el folleto del día de las Lenguas editado por la Comisión Europea ofrece un vocabulario básico de 25 idiomas europeos, incluido el maltés. Pero no aparece el catalán. ¿Qué tienen los 330.000 malteses que no tengamos los siete u ocho millones de catalanohablantes?

29-IX-08, Magí Camps, lavanguardia