nova eina per a l´activisme polític global

En los años de la guerra fría eran emisoras como La Voz de América las que cumplían la función de proveer información a los disidentes de los países de la órbita soviética. En el 2011 la radio ya no es un medio subversivo y propagandístico eficaz. Estados Unidos busca tácticas nuevas.

En los últimos años, formar a internautas disidentes ha sido una de estas tácticas. Pero Washington se da cuenta de que la red es un arma de doble filo. Sirve tanto a la oposición para agitar como a los gobiernos para controlar a los opositores. ¿Cómo conectarse a internet o comunicarse por móvil eludiendo la censura o la vigilancia? El Departamento de Estado está desarrollando un sistema destinado a permitir eludir los controles de regímenes autoritarios, según publicó ayer The New York Times.



"Cada vez vemos más y más personas en todo el mundo usando internet, teléfonos móviles y otras tecnologías para lograr que sus voces se oigan cuando protestan contra la injusticia", declaró la secretaria de Estado, Hillary Clinton, al citado diario. "Hay una oportunidad histórica para ayudar a un cambio positivo que América apoya", añadió.

Según datos oficiales, el Departamento de Estado habrá gastado al final de este año 70 millones de dólares en programas para eludir el control de otros países sobre la red y los móviles. The New York Times revela la existencia de una célula de cuatro contratados externos del Departamento de Estado que, desde una oficina en la calle L del centro de Washington - muy cerca de la redacción de la revista Foreign Policy y el influyente laboratorio de ideas New America Foundation-,diseñan lo que denominan "internet en una maleta". Se trata de una maleta con un ordenador portátil, pequeñas antenas, CD y otra tecnología. Trasladada a otro país, la maleta creará una red invisible a las autoridades, con la que los opositores podrán comunicarse sin riesgo. El proyecto, que cuesta unos dos millones de dólares, lo dirige Sascha Meinrath, un psicólogo de formación vinculado a la New America Foundation.

Clinton ha hecho de la libertad en la red una de sus prioridades, aunque esta política tope con contradicciones: desde el apoyo a regímenes que niegan esta libertad, como Arabia Saudí, hasta la reacción furibunda de Washington a la publicación en Wikileaks de documentos del Departamento de Estado y el Pentágono. Internet se ha convertido también en escenario de escaramuzas con China, origen de un ciberataque reciente contra correos electrónicos de altos funcionarios de la Administración Obama.

Algunos expertos - los llamados ciberrealistas,por oposición a los ciberutópicos-dudan de que internet sea una verdadera arma de liberación. "En Washington - decía en enero Yevgueni Morózov, autor de un ensayo sobre "la ilusión de la red"-muchos creen que en cuanto se proporcione a los chinos instrumentos para eludir el muro de censura en internet, enseguida irán en masa a las webs de Human Rights Watch o Amnistía Internacional para bajarse informes sobre abusos de derechos humanos, y que empezarán a protestar en la calle. Es una ingenuidad".

13-VI-11, M. Bassets, lavanguardia