Hace unos días, la revista científica de humor Annals of Improbable Research, concedió sus Ig Nobels, destinados a investigaciones serias, reales, pero que suenan a auténtico cachondeo. El nobel de la paz, entre comillas, ha recaído en dos profesores suizos que determinaron si es mejor ser golpeado en la cabeza por una botella de cerveza llena o vacía. Y el de salud pública ha premiado el invento de un sujetador que, en caso de emergencia, puede convertirse en dos mascarillas de gas. Sí, en el mundo real hay científicos que consagran su vida a analizar las arrugas de las sábanas en una noche de insomnio o a estudiar el tratamiento de penes atrapados por cremalleras. Tan paradójica es la realidad que, en cambio, existen noticias falsas que parecen verdaderas como las que leo en el ingenioso periódico de humor hecho en serio, El MundoToday: "Rajoy por fin, ha revelado que la trama corrupta del PP es un juego de rol". Casi tan real como que el amiguito del alma de la trama Gürtel es Zapatero, según el marmóreo y sonriente Camps.
La web ElMundoToday.com fue creada hace un año por dos jóvenes filósofos, Xavi Puig y Kike García, que reaccionaron ante un artículo de Quim Monzó publicado en La Vanguardia en el que el escritor se lamentaba del retroceso del periodismo satírico. Su modelo fue The Onion,la biblia de la contrainformación, con tres millones de usuarios en la red, y tal es su influencia que a veces otros medios difunden sus noticias falsas en un burdo copiar y pegar, sin contrastarlas, como ocurrió con dos periódicos de Bangladesh que fusilaron la antinoticia de que Neil Armstrong había confesado que el aterrizaje en la Luna fue un montaje. El MundoToday, que debutó el lunes en formato audiovisual, producido por ElTerrat, asegura que por fin se ha descubierto un espejo que refleja la sociedad, también informa de que un argentino se ha ahogado en su propio ego, que un albañil antisistema ha socavado los cimientos de la sociedad y que la nueva versión de iPhone no se venderá a la gente de pueblo. Lo más sintomático es que los titulares más disparatados no superan la realidad.
28-X-09, Joana Bonet, lavanguardia