29-IX-08, Barcelona, taula rodona ´Guinea Equatorial, memòria negra´

     
 

El colonialisme espanyol a l'Àfrica negra és un dels episodis més ignorats i silenciats de la història recent d'Espanya. Guinea Equatorial, antiga colònia espanyola, va accedir a la independència ara fa quaranta anys, el 12 d'octubre del 1968. Els turbulents anys posteriors van conduir a la dictadura de Francisco Macías, seguida pel règim actual dirigit pel seu nebot, Teodoro Obiang, màxim beneficiari de la indústria petroliera. Mentre les institucions de defensa dels drets humans denuncien la dictadura d'Obiang, les democràcies occidentals hi fan la vista grossa per tal d'accedir a les immenses reserves petrolieres del país.

Amb aquesta jornada, el CCCB vol contribuir a l'anàlisi de l'herència del colonialisme espanyol en la línia de la reflexió oberta per països com França, Bèlgica o el Regne Unit sobre el seu passat recent.




18 h Projecció del llargmetratge documental Memòria negra, 2007, VOSE

El documental analitza el període de la colonització espanyola i la seva herència política, religiosa i cultural a Guinea Equatorial.



19.30 h
TAULA RODONA

Hi participen:
Gustau Nerín, antropòleg i historiador especialitzat en l'estudi del colonialisme espanyol a l'Àfrica.
José Luis Nvumba, advocat guineà, exiliat a Catalunya.
Xavier Montanyà, periodista i director del documental "Memòria negra".


 
     
 

Entrada gratuïta. Places limitades.

 
     
  Montalegre, 5 | 08001 Barcelona | 933 064 100 | www.cccb.org

 

Guineanos todos

Sergi Pàmies, 26-IX-08, lavanguardia 

'Memoria negra', de Xavier Montanyà, es un trabajo cultural y contemporáneo

El lunes 29, en el CCCB (18 h), se proyectará Memoria negra,un documental de Xavier Montanyà. A continuación (19.30 h), empezará una mesa redonda que tratará de una cuestión incómoda para la historiografía oficial: la descolonización española de Guinea. Montanyà, cuyos trabajos anteriores dan fe de su afición por las historias susceptibles de agrietar olvidos premeditados, dedicó parte del año 2006 a construir, a partir de un río guineano heredado con rituales literarios, el relato fragmentado y periodístico de un proceso salvaje. Alternando imágenes de archivo y testimonios, retrata patologías del poder que, siendo locales, pueden aplicarse a muchos países (incluso a democracias de alma hipotecada). Evangelizaciones que combinan idealismos redentores y ceremoniales tan inequívocos como el brazo en alto se mezclan con un sentido feudal de la represión. Paralelamente a imágenes y datos que sitúan al indocumentado en la materia, aparecen un banderillero guineano y el testimonio de exiliados pertenecientes no sólo al bando de las víctimas sino también a los que, habiendo nacido en Guinea y perteneciendo a las familias colonizadoras, expresan sus contradicciones sentimentales.

El careto de Fraga o la desafiante indignación de García Trevijano refuerzan la sospecha. Y, como en todos estos procesos (franceses, belgas, alemanes o ingleses), la coartada de la alfabetización propicia mecanismos de expoliación. Hay contrastes espeluznantes, como la iconografía falangista trasladada a territorios que descubren la rentabilidad de llamarle progreso a la extracción desenfrenada de recursos naturales y los chanchullos de un régimen poco dado a dar explicaciones (un mutismo heredado por sus demócratas sucesores). Contra eso, movimientos de independencia susceptibles de ser instrumentalizados bien por los adversarios, bien por la egolatría entendida como forma de tiranía y, en algunos casos, de espectáculo. El desenlace está claro: sangre, dolor y olvido. Pero, al cabo de los años, siempre aparece un hijo inconformista que insiste en averiguar qué le ocurrió a su padre asesinado o torturado y que remonta las aguas del río. Y esa tenacidad, desordenadamente expresada en Memoria negra sin disimular sus disidentes intenciones, desoye pactos de silencio y amplifica voces ignoradas. Coproducido por la Universitat Pompeu Fabra, Canal + (que ya lo ha emitido ), Ovideo, Fernando Colomo Productions y las cadenas públicas TVE y TV3 (que aún no lo han emitido), el documental de Montanyà ya tiene una breve pero intensa vida en festivales (Valladolid, Cádiz, Tarifa, México y, próximamente, Pernambuco) y circula, como producto de contrabando, en los entornos ideologizados del exilio y la oposición. Que se proyecte en el CCCB es un acto de sensatez: Montanyà es barcelonés y su trabajo es al mismo tiempo cultural y contemporáneo.