Administració UE per a Kosova, en fals

El meticuloso plan de los Veintisiete para guiar los primeros pasos del Kosovo independiente se enfrenta a sus primeros obstáculos y retrasos. Todo indica que el próximo 15 de junio no se producirá la transferencia de poderes prevista entre la ONU y el nuevo Estado kosovar, que a su vez debe ceder parte de esas competencias a la Unión Europea. Sólo 300 de los 1.900 funcionarios de la misión europea planeada para pilotar ese proceso están desplegados sobre el terreno.

Los ministros europeos de Exteriores y de Defensa debatieron ayer los retrasos respecto al plan inicial, a la vista de la resistencia de las Naciones Unidas a ceder espacio físico (oficinas, vehículos, ordenadores) y legal (competencias en justicia) a la misión europea. Javier Solana, alto representantes de la UE para Política Exterior, se reunirá el próximo jueves con el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki Mun, para debatir la "reconfiguración" de su misión en Kosovo y "la forma en que se adapta a la nueva realidad del país", explicaron fuentes diplomáticas.

El problema radica en que el análisis de esa realidad - la declaración de independencia de Kosovo del 17 de febrero- no es coincidente en el Consejo de Seguridad de la ONU, donde Rusia, en defensa de Serbia, cuestiona la legalidad de la misión europea y se resiste a la retirada de la misión internacional Unmik, presente en la antigua provincia serbia desde los bombardeos de 1999. "Las matemáticas no han funcionado", lamentan fuentes diplomáticas.

Poco a poco se va a abriendo paso el convencimiento de que ambas misiones, la de la ONU y la de la UE, convivirán sobre el terreno durante algunos meses.

Varios ministros alertaron ayer del riesgo de que esta cohabitación confirme "un reparto geográfico" de Kosovo si la ONU mantiene el mando al norte, en Mitrovica, donde se concentra la mayor proporción de población serbia, como advirtió ayer el jefe de la diplomacia francesa, Bernard Kouchner. "En un primer momento, la misión se desplegará en el sur, pero poco a poco ocupará todo su espacio", aseguró, incluido el norte, aunque lleve más de tiempo de lo previsto.

Los ministros europeos acordaron ayer que la UE no asumirá sus funciones hasta que el nuevo Estado kosovar solicite su ayuda y tenga todos los medios necesarios para actuar, algo que hasta ahora está resultando más complicado de lo previsto por los problemas legales que rodean a la misión. Yves Kermabon, jefe de la misión europea, denominada EU-Lex, advirtió la semana pasada que el despliegue se encuentra en stand by,aunque ayer los ministros europeos subrayaron que sus objetivos - la estabilización de las débiles estructuras del nuevo país nacido en el patio de Europa- no han cambiado.

El riesgo de que las tensiones en Kosovo salpiquen a la vecina Bosnia convenció ayer a los ministros de Defensa de la necesidad de mantener los 2.500 efectivos de su fuerza de paz en el país, donde relevó a las fuerzas de la OTAN en el 2004.

27-V-08, B. Navarro, lavanguardia