manifestació a Belgrad (i cremada ambaixada USA)

21-II-08, lavanguardia.es: Belgrado. (EFE).- Un grupo de manifestantes serbios contra la independencia de Kosovo han prendido fuego a la embajada de EE.UU. en Belgrado, tras la marcha que ha reunido a dedenas de miles de ciudadanos en las calles de la capital.

El primer ministro serbio, Vojislav Kostunica, declaró hoy al inicio de la marcha que Kosovo es parte de Serbia "desde siempre, y parasiempre será así". "No hay fuerza, amenaza ni condena que haga que un serbio diga que Kosovo es otra cosa si no Serbia", exclamó Kostunica. "Si renunciamos a nuestro origen, la historia, entonces ¿quiénes somos?", preguntó Kostunica tras enumerar los monasterios medievales serbios que hay en Kosovo. Para muchos serbios, Kosovo es el centro de su identidad nacional y de su espiritualidad cristiana ortodoxa.

El primer ministro criticó a las grandes potencias occidentales al insistir en que "piden a Serbia que se humille" y renuncie a Kosovo, y dijo que "nadie obtendrá el mandato del pueblo serbio para que acepte ese comercio poco decente" mientras era aclamado por los congregados, que portaban banderas de Serbia y pancartas con lemas como "Kosovo es el corazón de Serbia", "Permanecerá serbio", iconos cristianos ortodoxos y también fotos de los serbios desaparecidos en Kosovo durante la guerra (1998-1999) y después del conflicto.

La protesta, titulada "Kosovo es Serbia", ha comenzado en la plaza frente al emblemático edificio del Parlamento serbio, con la entonación del himno nacional "Dios de justicia". La manifestación ha sido organizada por el gobierno y varios partidos parlamentarios, que quisieron "canalizar el descontento, la furia y la cólera" que se siente en Serbia por la independencia de Kosovo, reconocida ya por Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Alemania, Italia y otros países.

Llegaron a la protesta también serbios de Montenegro y de Bosnia. La plaza céntrica y las calles de los alrededores están repletas y se considera que el número de los congregados supera en mucho las 100.000 personas, pero hasta el momento no se dispone de datos de participación.

Los líderes de Serbia instaron a los ciudadanos a protestar "con calma y dignidad" y a "mostrar al mundo que Serbia no acepta la independencia de Kosovo".

Agradecimiento a España
Los manifestantes de la protesta multitudinaria en Belgrado contra la independencia de Kosovo llevaron banderas de España, en señal de afecto por el país que no reconoció esa soberanía unilateral, a la que Serbia se opone.

Decenas de miles de personas se habían congregado ya, media hora antes del inicio oficial de la protesta, en la plaza frente al emblemático edificio del Parlamento serbio para manifestarse contra la independencia de Kosovo, declarada el 17 de febrero.

Los manifestantes, que se acercan a esa zona del centro desde todos los barrios de Belgrado, llevan banderas de Serbia, pero también de Brasil, Rusia y de otros varios países que rechazan reconocer la independencia de la provincia que Serbia considera parte inalienable de su territorio.

El pasado martes, el viceprimer ministro serbio, Bozidar Djelic, transmitió al embajador español en Belgrado, José Riera Siquier, el agradecimiento del Gobierno de Serbia por "la postura de principio y consecuente de España de no reconocer la independencia unilateral" de Kosovo.

Djelic recalcó en esa ocasión que Serbia "se opone a cualquier violencia y luchará por sus intereses estatales legítimos con todos los medios diplomáticos y jurídicos disponibles". Serbia considera la independencia kosovar una violación de la Carta de la ONU y del derecho internacional.

El tenista Novak Djokovic, en contra de la independencia El tenista serbio Novak Djokovic, ganador del Abierto de Australia y tercero del mundo, entusiasmó hoy a la muchedumbre congregada en Belgrado al conectarse mediante un vídeo desde Montecarlo para transmitir un mensaje en contra de la independencia de Kosovo.

"Éste es uno de los momentos más difíciles de la historia de Serbia", dijo Djokovic, que agradeció a todos los reunidos hoy en el centro de Belgrado "que muestran que no somos pequeños y que estamos dispuestos a defender" Kosovo.

Djokovic lamentó no estar en Belgrado, pero aseguró que él y su familia están "con todo el corazón junto a Kosovo", y señaló "Kosovo es Serbia y así tiene que ser para siempre".

También se dirigió a los congregados el baloncestista Dejan Bodiroga, ex jugador del Real Madrid, del Barcelona, del Panathinaikos griego, del Zrenjanin serbio, del KK Zadar croata y, en Italia, del Trieste y del Roma, del que ahora es director deportivo, y quien dijo: "éste es uno de los partidos más importantes para Serbia, que se jugará hasta la victoria final". Bodiroga pidió al pueblo "la dignidad y unidad" en la pugna por Kosovo, que Serbia considera su parte inalienable.