OIEA: Iran prepara armes nuclears

Nunca se había registrado un pronunciamiento similar, de repercusiones hoy insospechadas. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) emitió ayer el primer informe en el que abiertamente se indica que Irán realiza experimentos "relevantes" para "el desarrollo de armas nucleares".

Más allá de las sospechas, los inspectores del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) califican de "creíble" el conjunto de evidencias que han recopilado. Su temor surge de las informaciones aportadas por una "diversidad" de fuentes independientes, entre las que citan al menos una decena de países, así como los datos facilitados en ocasiones por los mismos científicos de la república islámica.

La irrupción de este documento se produce en un contexto complejo. El pasado mes, Washington desveló el plan iraní de asesinar al embajador de Arabia Saudí mientras estaba en un restaurante. Este plan, calificado de "extraño" por la propia prensa estadounidense, precipitó las informaciones de que Israel pretendía atacar el territorio de Irán.

El ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, reaccionó ayer con contundencia. Como las sanciones no funcionan, subrayó, sobre la mesa "están todas las opciones". Esta es la frase a la que recurren de habitual cuando se plantean lanzar un asalto militar.

Desde la Casa Blanca, la primera respuesta al informe de la OIEA fue el silencio. Esta postura no es más que el reflejo de una estrategia de prudencia. Después del tremendo ridículo por las supuestas armas de destrucción masiva escondidas en Iraq, Obama prefiere no arriesgar. Su opción pasa por el propio recorrido del informe y que, a partir de él, se organice una respuesta global.

Una portavoz del Departamento de Estado se limitó a decir que lo habían recibido. "Lo vamos a estudiar, no estamos en disposición para hablar sobre ningún posible paso a dar", reiteró.

Sin embargo, el Gobierno de Teherán rechazó las conclusiones de los expertos y habló de "montaje". Según su versión, el documento está políticamente motivado, carece de profesionalidad y adolece de desequilibrio. "Repite las reclamaciones de EE. UU. y del régimen sionista que ya fueron rechazadas por la agencia en ocasiones anteriores", indicó en una nota oficial.

Este vez, los expertos concluyen que, si bien algunos desarrollos tecnológicos descubiertos se pueden emplear con usos pacíficos, otros son "específicamente" ideados para el desarrollo de armas nucleares. Aunque el informe no señala cuánto tiempo les llevará a los iraníes producir ese arsenal, se asegura, en cambio, que Teherán ha ido bastante más allá de la creación de modelos computerizados sobre explosiones nucleares. Incluso se remarca que ha habido ensayos sobre el empleo de detonadores.

Estos trabajos se iniciaron en el 2000. Los iraníes han llegado a construir un enclave específico para escenificar estos experimentos, algo que se ocultó a los inspectores que visitaron el lugar hace cinco años. "Estos tests se convierten en sólidos indicadores del progreso armamentista".

De todos estos trabajos clandestinos se deduce el intento de producir un "diseño propio" de cabeza nuclear. Bajo esta premisa, Teherán procedió a la compra de información y documentación a una red clandestina de material atómico. En concreto, los expertos del OIEA se refieren a la red del científico pakistaní Abdul Kadir Khan, quien durante años vendió materiales y conocimientos nucleares a países como Corea del Norte o Libia.

Yukiya Amano, responsable de la agencia, insiste en que han recopilado "miles de páginas". De su lectura se certifica "la investigación, el desarrollo y la experimentación" sobre una serie de tecnologías que sólo conducen a una meta: la bomba atómica.

9-XI-11, F. Peirón, lavanguardia