solidarització popular amb Ai Weiwei

Apoyo popular al artista Ai Weiwei. Miles de internautas chinos han iniciado una campaña de ayuda al intelectual disidente para que pueda afrontar el pago de la multa de 15 millones de yuanes (1,7 millones de euros) que le exigen las autoridades de Pekín por evasión fiscal, tras haberlo retenido ilegalmente durante casi tres meses. El activista ha afirmado que lo acepta como préstamo pero no como donación.

Las muestras de solidaridad con Ai Weiwei se han disparado este fin de semana en China y han demostrado a las autoridades de Pekín lo complejo que resulta controlar la actividad en internet. En apenas cuarenta y ocho horas este activista de 54 años ha recibido 3,48 millones de yuanes (casi 400.000 euros) en concepto de aportaciones de simpatizantes para que pueda pagar la multa que le impone la Hacienda china.

Esta movilización de internautas se produce a las pocas semanas de que los líderes del Partido Comunista hayan decidido ejercer un mayor control en la gestión de las redes sociales.

Una decisión que tendría por objetivo eliminar rumores y pornografía en la red, así como el fraude y la difusión de información considerada dañina, según la agencia Xinhua. Una estrategia para la cual las autoridades chinas han pedido la complicidad de las grandes compañías tecnológicas del país.

Y es que en los últimos tiempos, las autoridades chinas se han mostrado muy preocupadas por la explosión de microblogs y su potencial para traspasar los controles y la censura, y convertirse en fuente de críticas a la gestión del Gobierno y altavoz generador de protestas populares.

La campaña de solidaridad con Ai Weiwei se puso en marcha el pasado fin de semana. Se inició tres días después de que el artista recibiera una notificación de la Oficina de Impuestos Locales de Pekín comunicándole que dispone de dos semanas para pagar 15 millones de yuanes (1,7 millones de euros) en concepto de impuestos impagados y multa por el retraso, ydeque él se declarara insumiso fiscal.

Hasta el momento, más de 10.000 jóvenes y estudiantes le han hecho llegar sus aportaciones, según explica en su microblog

Zuoxiao Zuzhou, un cantante de rock amigo de Ai Weiwei. El dinero llega por transferencias bancarias, giros postales, envío de dinero en efectivo o través de pagos en internet.

Ai Weiwei, que permaneció detenido durante 81 días en paradero desconocido entre los meses de abril y junio, ha agradecido las muestras de solidaridad a través de su microblog. "El sentido de la palabra popular se ha hecho evidente", comentó, tras añadir en su mensaje que "lo que cuenta no es la cantidad, sino el número de personas implicadas". Y a continuación precisó que aceptaba estas ayudas como préstamos, pero no como donaciones.

El famoso diseñador y disidente también baraja la posibilidad de usar la vivienda de su madre como aval para poder afrontar la abultada multa que le han impuesto las autoridades económicas chinas por la supuesta evasión de impuestos a través de la empresa de su mujer. No obstante, Ai Weiwei opina que se trata de una estrategia del Gobierno para silenciarlo por su abierta oposición al régimen.

El artista, uno de los intelectuales chinos más conocidos internacionalmente, fue detenido el pasado 3 de abril en el aeropuerto de Pekín cuando se disponía a tomar un vuelo con destino a Hong Kong y de allí a Alemania, para inaugurar una exposición. Y su arresto desencadenó una oleada de protestas de los países occidentales, desde Estados Unidos a Francia, pasando por Alemania o Australia.

Su detención se produjo en el marco de una de las más duras campañas de represión del régimen contra la disidencia, inducida por la idea de las autoridades de Pekín de evitar cualquier contagio de los movimientos revolucionarios en los países árabes a partir del pasado febrero.

7-XI-11, I. Ambrós, lavanguardia