la Unió de Repúbliques de Putin

Si Dimitri Medvédev deja como legado al abandonar el Kremlin el último intento de modernizar Rusia, el próximo presidente ruso también ha dejado grabado negro sobre blanco la hoja de ruta de la política exterior para los próximos seis años. Vladímir Putin, que seguramente será elegido en marzo del 2012, ha propuesto formar una "unión euroasiática" con la mayoría de las ex repúblicas soviéticas. Este mes de octubre ha expuesto esta idea en un artículo publicado en el diario Izvestia.

No se trata de refundar la Unión Soviética, aclara Putin. Pero la organización, que competiría en influencia con Estados Unidos, la Unión Europea y Asia, sería "uno de los centros de atracción del mundo moderno, y serviría de enlace entre Europa y la dinámica región Asia-Pacífico", explicaba el 4 de octubre en las páginas del rotativo moscovita. El historiador Andréi Grozin, jefe del departamento de Asia Central en el Instituto de países de la CEI, señala en una entrevista que "Putin ha escrito artículos en contadas ocasiones, por eso la idea que plantea va a ser vital en su política de los próximos años".

Para el politólogo Ígor Bunin, presidente del Centro de las Tecnologías Políticas, Putin necesitaba un proyecto rompedor después de escenificar el enroque político con su aliado Medvédev. Putin fue presidente de Rusia entre 2000 y 2008, pero la Constitución limita el poder del jefe del Estado a dos mandatos, así que pasó el testigo a Medvédev. Pero ha seguido siendo el hombre fuerte del país, y de lejos el político más popular. Aunque la mayoría de observadores y analistas creían muy probable que volviera al Kremlin en 2012, el anuncio oficial no se hizo hasta el congreso de su partido, Rusia Unida, a finales del mes de septiembre.

"La unión euroasiática era una idea central de Nazarbáyev (presidente de Kazajistán). Al tomarla en serio, (la élite rusa) da un paso en las buenas relaciones con Nazarbáyev, y a su vez lanza un mensaje a Ucrania: formad parte de nuestra unión, luego todo irá bien y nos podremos asociar con Europa", explica Bunin.

La base de la idea es la Unión Aduanera de Rusia, Bielorrusia y Kazajistán. En verano estas tres ex repúblicas soviéticas levantaron sus barreras aduaneras, y en los próximos meses introducirán reglas de comercio comunes.

Ucrania, que tras la revolución naranja del 2004 hasta el 2010 estuvo presidida por el prooccidental Víktor Yuschenko, ha mejorado sus relaciones con Rusia en el último año y medio. Pero el actual presidente, Víktor Yanukóvich, era reticente a adherirse a la Unión Aduanera si eso suponía romper los puentes hacia la UE.

Pero esa posición ha cambiado en el último mes. El 19 de octubre Rusia, Bielorrusia, Ucrania, Modavia, Armenia, Kazajistán, Kirguistán y Tayikistán firmaron un acuerdo en San Petersburgo para establecer una zona de libre comercio. Uzbekistán, Azerbaiyán y Turkmenistán podrían hacerlo en próximos meses.

Aunque la Unión Aduanera es una organización básicamente económica, tiene muchas lecturas políticas. En primer lugar, el arquitecto de la idea la ha utilizado en la arena internacional, y según él mismo explicó en Izvestia,es la base para una organización mayor. Además, puede ser el paso para que la élite ucraniana se termine inclinando hacia Moscú. Polonia, vecina de Ucrania, intentaba atraerla hacia la UE.

"Resulta interesante que esto lo proponga el hombre que dijo que la disolución de la URSS fue la mayor catástrofe geopolítica del siglo XX", apunta Bunin. Pero el mismo Putin ya señaló que no se trata de reconstruir la URSS. "Refundar la URSS no es posible, pero Putin cree que esta unión es el modelo óptimo de colaboración entre los países ex soviéticos", dice Grozin.

Para algunas ex repúblicas quedar fuera de la Unión Aduanera sólo representaría problemas. La principal razón para la adhesión de Tayikistán y Kirguistán es que la mayoría de sus emigrantes (un millón por cada país) viven en Rusia. Ellos aportan casi la mitad del PIB en remesas. Además, "hasta hace poco Kirguistán obtenía un tercio de sus presupuestos de los impuestos del paso de mercancías de China hacia Kazajistán y Rusia; de no unirse, podría perderlo", explica Grozin.

Una idea apuntada en varios foros por los líderes rusos es crear en el futuro una alianza comercial con la Unión Europea. La Unión Euroasiática sí estaría entonces completa: como afirman ellos, "de Lisboa a Vladivostok".

31-X-11, G. Aragonés, lavanguardia