El servicio on line de Sony fue atacado el 19 de abril. En días previos también había sido atacado por el grupo Anonymous, después de que la compañía denunciara a un hacker por haber publicado la forma de desbloquear su videoconsola.
La compañía había combinado los datos de los usuarios de PlayStation con los de Qriocity, que ofrece música y películas a través de sus televisores Bravia y sus reproductores Bluray. Ambos servicios quedaron cerrados el pasado 20 de abril, tras detectarse la intrusión.
El director de comunicación de la compañía, Patrick Seybold, explicó en el blog oficial de la plataforma que Sony ha encargado una investigación privada a expertos para conocer la naturaleza y el alcance de la intrusión, Una vez conocidos, la firma tecnológica compartió ayer sus principales inquietudes con los usuarios afectados.
La directora de negocios de Sony España, María J. López, aconsejó a los usuarios de sus plataformas "que presten atención a los movimientos de sus cuentas bancarias por si detectan algo que no sea correcto", según dijo a la agencia Efe.
Sony ha admitido que, entre los datos que se han visto comprometidos por la intrusión ilegal se encuentran los números de las tarjetas bancarias de sus clientes, si bien aseguró que no han quedado expuestos a los delincuentes los dígitos de control de las mismas.
En España, la organización de consumidores Facua reclamó ayer a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) la apertura de una investigación por el problema de seguridad de Sony. El regulador británico de protección de datos pidió ayer mismo explicaciones sobre el caso.
La compañía ha denunciado la intrusión en sus redes ante la sede de la agencia del FBI de San Diego (California), que está especializada en ciberdelitos. Los servicios de PlayStation Network y Qriocity han quedado suspendidos de forma indefinida, aunque no definitiva, hasta que la compañía tenga asegurada por completa la seguridad de sus sistemas.
