intents de protesta a Pekín i Shanghai

Este fin de semana la palabra ´jazmín´ estaba bloqueada en algunos microblogs y otros foros de discusión en la red.

Las fuerzas de seguridad chinas sofocaron ayer con celeridad las concentraciones de personas que se habían congregado en el centro de Pekín, Shanghai y once ciudades más, convocadas a través de internet para extender la revolución del jazmín árabe a China.

Estos llamamientos, llevados a cabo a través de Boxun, una página web ubicada en Estados Unidos, constituyen los primeros intentos de protesta que se producen en China como eco de las movilizaciones reivindicando democracia que tienen lugar actualmente en varios países árabes.

Un centenar de personas en Pekín y otro en Shanghai, y algunas decenas en ciudades como Cantón, Harbin o Chengdu, desafiaron la amplia y visible presencia de fuerzas del orden y acudieron a la convocatoria que el día anterior se había difundido a través de internet. El mensaje en la red emplazaba a la gente a manifestarse y a corear consignas pidiendo trabajo, vivienda, alimentos y justicia.

La presencia masiva de efectivos de las fuerzas del orden, uniformados y de civil impidieron, en la práctica, las manifestaciones.

Demostraron, sin embargo, la determinación de las autoridades chinas de evitar cualquier demostración de contestación al poder del Partido Comunista.

En Pekín, la convocatoria congregó a un centenar a de personas frente a un McDonald´s de la céntrica calle Wangfujing, una de las principales arterias comerciales de la ciudad, situada a unos centenares de metros de la plaza de Tiananmen.

La fuerzas de la policía dispersaron, sin embargo, con celeridad la concentración y detuvieron a dos personas. Una de ellas era una persona mayor que increpó a los agentes y la otra un joven que dejó un jazmín junto al restaurante McDonald´s.

En Shanghai se repitió la misma situación. La policía acudió con mucha antelación al lugar previsto para la convocatoria - una cafetería Starbucks-y procedió, con la misma rapidez, a dispersar a los manifestantes. En esta última concentración, las fuerzas del orden detuvieron a tres personas. Y según la agencia oficial de noticias Xinhua, varios testigos relataron que un hombre que había empezado a pronunciar un discurso desapareció en cuanto llegó la policía.

Según el Centro de Información para los Derechos Humanos y Democracia de Hong Kong, más de un centenar de activistas han sido puestos bajo arresto domiciliario o custodia policial estos últimos días y estaría relacionado con la convocatoria de ayer.

Precisamente, el mismo sábado en que se difundía a través de la red la convocatoria de manifestación, el presidente chino, Hu Jintao, había reclamado una gestión más estricta de internet por parte de las autoridades, según informa la agencia Reuters.

21-II-11, I. Ambrós, lavanguardia