Entre los días 1 y 17 de este mes de octubre, el gobierno francés ha deportado a Rumanía a 8.601 gitanos que, al parecer, se encontraban en situación irregular. El Gobierno francés, que ha asumido la legislación europea sobre la libre circulación de personas, asegura que va a destinar un millón de euros a la reinserción en Rumanía de estos gitanos. Asimismo, se esforzó ayer por destacar que 7.447 aceptaron la deportación de forma voluntaria. Las expulsiones de los gitanos que no tengan los papeles en regla continuarán. 26-X-10, efe, lavanguardia
