quart atemptat al mateix mercat d´Ossètia del Nord

El mercado es uno de los centros vitales de Vladikavkaz, capital de la república de Osetia del Norte y una de las ciudades más populosas del Cáucaso ruso. Como en otras trágicas ocasiones, un terrorista suicida eligió ayer este concurrido lugar para provocar una masacre. El coche bomba que conducía estalló poco antes del medio día y causó la muerte de al menos 17 personas y 133 heridos, según el último cómputo de las autoridades rusas.

El terrorista accionó los explosivos cuando pasaba por la entrada principal. A esa hora la zona se hallaba muy transitada. Además del mercado, en la misma calle se encuentra una oficina de empleo. Un portavoz del Ministerio de Situaciones de Emergencia, Alexander Pogorely, informó que se había hospitalizado a 98 personas, muchas de las cuales se encontraban en situación crítica. Ese organismo envió a Vladikavkaz aviones con personal y equipos médicos para evacuar a los afectados.

El presidente de Rusia, Dimitri Medvedev, calificó a los autores del atentado de "bestias". El jefe del Kremlin pidió a los encargados de la investigación "hacer todo lo posible para encontrar a los canallas".

Hasta el momento, la población de Osetia del Norte, que es mayoritariamente ortodoxa y no musulmana como sus vecinos, se ha visto relativamente libre de la violencia islamista de Ingushetia y Daguestán. En Chechenia, castigada con dos sangrientas guerras en las últimas dos décadas, las fuerzas rusas han logrado dispersar a las guerrillas rebeldes y aunque sigue habiendo atentados suelen ser esporádicos y no tan violentos como antaño.

Pero la historia de Osetia y su capital, Vladikavkaz, tras el fin de la URSS también es trágica, como demuestra la cronología de atentados y luchas armadas. En 1992 las tensiones étnicas entre osetios e ingushes se transformó en una guerra abierta. En 1999 una bomba en el mercado central segó la vida de 55 personas. Otro atentado en el mismo lugar causó seis muertos en el 2001, y en el 2004 once personas murieron cuando estalló un minibús aparcado junto al mercado.

La tragedia más conocida de Osetia del Norte es el secuestro de cientos de personas en una escuela de la ciudad de Beslan, a 20 kilómetros de Vladikavkaz, y de la que este mes se han cumplido seis años. Entre el 1 y el 4 de septiembre del 2004, un comando de guerrilleros chechenos se hizo con el colegio. En el intento de libertar a los secuestrados murieron 334 personas, la mitad niños.

El de ayer fue el atentado más grave de este año en el Cáucaso desde los dos del pasado 31 de marzo en Kizliar (Daguestán) que siguieron a dos bombas en el metro de Moscú del día 29. En la capital rusa fallecieron 40 personas, mientras que en Kizliar las víctimas mortales fueron 12. El jefe del FSB, Alexander Bortnikov, anunció la detención de tres sospechosos.

10-IX-10, G. Aragonés, lavanguardia