´Carta abierta a la consellera Geli´, Eulàlia Solé

Apreciada señora Geli: La petición de que sea obligatorio que los enfermos de alzheimer o con demencia senil sean atendidos en urgencias acompañados es un tema recurrente al que esta conselleria no ha prestado oídos. En lo que a mí se refiere, lo he pedido públicamente a través de artículos en La Vanguardia,algunos de los cuales han merecido la aquiescencia también pública de varias cartas de lectores. En contacto con la Associació Familiars Alzheimer (AFA), hemos intentado conjuntamente y sin éxito ser recibidos en la conselleria para tratar de dicha reglamentación. Actualmente, y desde septiembre del 2009, el asunto se encuentra en la oficina del Síndic de Greuges. El último informe que me ha enviado la Sindicatura dice: "Restem encara a l´espera de la resposta del Departament de Salut".

El día 8 de este mes de mayo, aparecía en este diario una carta de la señora Herme Bartoll en la cual se lamentaba amargamente del trato recibido por su madre, con demencia senil, en urgencias hospitalarias. Desde fuera oía sus gritos al ser explorada, en plena confusión mental y sin poder explicarse. Describe la señora Bartoll "el sufrimiento de los familiares que, con enfermos de alzheimer o demencia, ven cómo se les niega el derecho a acompañarlos en urgencias; se niega la entrada a las únicas personas que les entienden".

Lo que en Catalunya se está pidiendo ya es una realidad en comunidades como por ejemplo Canarias, donde en el 2007 la AFA de Lanzarote logró que sea obligatorio que los enfermos de alzheimer u otras demencias "permanezcan acompañados en todos los servicios sanitarios".

Lo más sorprendente, indignante, de esta indiferencia por parte de la Conselleria de Salut es que se trata de una medida que no requiere presupuesto alguno, tan sólo consideración ante el sufrimiento de enfermos y acompañantes. Más allá del lustre de las inversiones, también necesarias y justamente reconocidas, está la salvaguarda del bienestar físico y moral de los enfermos. ¿Cuántas personas con confusión mental han sufrido en urgencias desde que el asunto fue propuesto al Departament de Salut? ¿Cuántas sufren en este mismo momento y cuántas les seguirán? Señora Geli, por favor, una orden y su firma pueden evitar mucho dolor. No cuesta dinero, sólo es cuestión de sensibilidad.

14-V-10 Eulàlia Solé, socióloga y escritora, lavanguardia