ŽEl Estatut de Joselito el GalloŽ, Enric Juliana

- ¿De nuevo por aquí? No le esperaba tan pronto.

- No he podido resistir la tentación. El oráculo acertó y he de saber más.

- ¿Qué más quiere saber?

- Cómo acabará todo.

- Jo, jo. Eso es pedir demasiado. Sería terrible saber como acabará todo. Sería el fin de la historia. Ande, ande, tómese una taza de gazpacho con comino. Precisamente hoy hemos empezado a servirlo. Ya sabe usted que aquí, en la cueva de Zaratustra, el año se divide en dos estaciones: la del caldo y la del gazpacho. Para entender a don José Ortega y Gasset el comino va muy bien. El comino esclarece la perspectiva. Y previene la gastritis.

- Segador,no se ría de mí. Necesito saber más. El momento es grave.

- Confórmese con saber que el tercer estatuto de Catalunya pasará a la historia como el Estatut de Joselito el Gallo. En 1932 triunfó el de Núria; en 1979 redactaron el de Sau, y ahora tendrán los recortes de Joselito el Gallo. El toro parlante ya se lo advirtió.

- Por eso he vuelto. Usted me dijo que al Estatut de Catalunya le repasarían la sisa en un patio de Sevilla, con un fondo de guitarras.

- Y así ha sido. Ajustado en la avenida Joselito el Gallo número 147, entre un alegre rasgar de guitarras. ¿Quiere saber más detalles?

- Sí, quiero.

- En el 147 de la calle dedicada al insigne torero gitano Joselito el Gallo, se levanta una de las más renombradas casetas de la Feria de Sevilla.

- Conozco esa caseta. Estuve en ella el año pasado, departiendo con José Rodríguez de la Borbolla y Manuel ÁngelMartín, dos buenos amigos. Es uno de los lugares de encuentro de la Sevilla ilustrada. Aires liberales y regionalistas.

- Allí se citaron, la noche del pasado domingo, los magistrados del Tribunal Constitucional Guillermo Jiménez, Manuel Aragón y Ramón Rodríguez Arribas, después de una tarde de toros en la Maestranza. Allí se dieron las últimas puntadas al Estatut. ¡Qué estampa! La veo. Sí, la veo.

- ¿Qué ve?

- Los tres magistrados en animada charla constitucional, el rasgar de las guitarras y el coro cantando la sevillana del búcaro.

- ¿Del qué?

- Del búcaro. Una jarra de agua. Es la tonada más pegadiza de la feria. ¿Quiere que se la cante? "Dame el búcaro, dame el búcaro que me muero de sed, apretújalo no se vaya a caer..." Venga, alégrese. Y cante conmigo: "Dame el búcaro, el búcaro..."

- Tendrán que romper el búcaro. No tienen otra salida.

- ¿Cómo dice?

- Para evitar el ridículo, al catalanismo sólo le queda una opción: romper el búcaro. Dar la fiesta por concluida. Generar una nueva fase política. No sólo en Catalunya. En toda España.

- ¿Y eso cómo se hace?

- No juegue conmigo, Segador. Usted lo sabe tan bien como yo. Convocando de inmediato elecciones al Parlament de Catalunya. Dando la palabra a la gente.

- Sabrá usted que tal decisión no obligaría a detener las deliberaciones. ¡El Alto Tribunal es independiente!

- Ya. Unas elecciones a finales de junio en Catalunya obligarían a revisar de inmediato todas las estrategias en curso. Todas. Pregúnteselo si no al señor Federico Trillo, el hombre al que todo el mundo cita en Madrid cuando se pregunta por la sentencia del Estatut.

- ¿El coordinador en la sombra del 6a 4en el Constitucional? ¿Es Federico Trillo quien reparte el búcaro?

- No me tienda trampas, Segador.Es el nombre más citado. No digo más.

- No las veo, no, no las acabo de ver esas elecciones. Significarían la muerte súbita del tripartito.

- El tripartito hace tiempo que murió. Y a los difuntos hay que darles pronta sepultura, por dignidad y por higiene.

- Oiga, que el oráculo soy yo.

- Yo también tengo mis visiones.

- Ya lo veo. No beba tanto gazpacho y vuelva pronto que he de contarle algo que muy poca gente sabe. Fíjese bien en esas fotos de Franco y de Guevara que me rodean. Le tengo reservada una historia que le sorprenderá.

2-V-10, Enric Juliana, lavanguardia