Estemírova (derecha) entregando
el 2º Premio Politkóvskaya a Malalai Joya
Las dos guerras de Chechenia, las violaciones de los derechos humanos en el presente y en el pasado, las víctimas de los gulag en la época soviética y la rehabilitación de represaliados, incluso el cómputo del número de muertos en la II Guerra Mundial son algunas ramas del trabajo de Memorial, una organización creada en 1991 y cuya actividad de documentación, investigación y defensa legal se extiende incluso a algunas de las repúblicas ex soviéticas.
Natalia Estemirova, la activista de derechos humanos asesinada el miércoles, tenía suficientes enemigos en la Federación Rusa como para que no se pueda señalar aún al culpable, pero Oleg Orlov, director de Memorial, la prestigiosa ONG para la que trabajaba desde hacía casi diez años, está "seguro" de que se trata de Ramzan Kadirov, el presidente de Chechenia, antes rebelde y luego apegado al Kremlin. Estemirova -de 50 años, madre de una hija de 16- fue secuestrada en Grozni, la capital chechena, y su cuerpo apareció unas siete horas después junto a una carretera en la vecina Ingushetia con disparos en la cabeza y el pecho.
Estemírova (derecha) entregando
el 2º Premio Politkóvskaya a Malalai Joya
"Se, y estoy seguro de ello, quién es el culpable. Todos conocemos su nombre. Se llama Ramzan Kadirov y es el presidente de la república chechena", escribe Orlov en la web de Memorial. Ayer, Orlov y miembros de otras organizaciones se reafirmaron en su sospecha, y algunos señalaron la responsabilidad de Vladimir Putin por haber permitido un clima de "impunidad" en Chechenia. "Acuso a los dos", dijo Liudmila Alexeyeva, del Grupo Helsinki. Oleg Orlov extendió esta responsabilidad a Dimitri Medvedev porque "no le importa tener a un asesino como dirigente de una república del país".
El presidente ruso, que se encontraba ayer en Munich, respondió a la demanda de la canciller Angela Merkel de que se investigue diciendo que los asesinos sabían que se acusaría a las autoridades chechenas. "Esta provocación, si quieren llamarla así, este crimen - dijo-estoy seguro de que la persona que lo cometió será castigada". Medvedev, en conferencia de prensa con Merkel, hizo elogio de Estemirova y su labor, "necesaria en cualquier Estado normal - dijo-,aunque desagrade a las autoridades".
El fiscal general, Yuri Chaika, dijo en televisión que supervisará personalmente el caso. Medvedev, según el diario Kommersant,encargó al presidente del comité de investigaciones de la fiscalía, Alexander Bastrikin, que envíe a Chechenia a "los mejores especialistas". No obstante, señala el diario, este personal está trabajando de forma casi permanente en la región desde el intento de asesinato del presidente de Ingushetia, Yunus-Vek Evkurov, el 22 de junio. Ramzan Kadirov - que no ha ocultado su ambición de fusionar ambas repúblicas federadas-envió tropas a Ingushetia para combatir a la insurgencia islamista por indicación de Medvedev.
También según Kommersant,el defensor del pueblo checheno, Nurdi Nujashev, relacionó el caso - "eslabones de una misma cadena"-con los de la periodista Ana Politkovskaya y el abogado Stanislav Markelov. Nujashev dijo que detrás habría culpables de crímenes de guerra en Chechenia, y en concreto se refirió al coronel Yuri Budanov, investigado por los tres asesinados. Sin embargo, Oleg Orlov dijo que Nujashev (hombre próximo a Kadirov, según algunas fuentes) confesó recientemente a Memorial que el último informe de Estemirova sobre secuestros y asesinatos había irritado a los dirigentes chechenos. Kadirov, dijo ayer Orlov, la había declarado su "enemiga personal".
17-VII-09, agcs/red, lavanguardia
