Mèxic: policia acorralada, narcos volen negociar amb lŽEstat

Tras comprobarse que los 12 cadáveres hallados junto a una autopista eran de agentes, la policía federal mexicana suprimió ayer las patrullas nocturnas y replegó a los efectivos de Michoacán en dos cuarteles. Desde ahora, vigilará las vías públicas de día y en convoys de varios vehículos. De este modo se pretende evitar los ataques que, por quinto día consecutivo, lanzan los sicarios del cartel conocido como La Familia. La orden de búsqueda y captura del diputado Julio Godov, hermano del gobernador, ha desatado un escándalo político.

16-VII-09, J. Ibarz, lavanguardia

Nunca los narcos se habían mostrado tan osados. Tan seguros están de su poder de intimidación que quieren negociar con el Estado y, además, afirman que "somos un mal necesario".

Tras una ofensiva de cinco días contra la policía federal en el estado de Michoacán, en una iniciativa inédita en la historia del crimen organizado, el cabecilla del cartel La Familia ha ofrecido un pacto nacional al presidente Felipe Calderón. La negativa fue inmediata. El ministro del Interior, Fernando Gómez Mont, respondió tajante que el Gobierno no negociará con criminales.

La petición de pacto se produce cuando en México se cuestiona cada vez más la estrategia bélica contra el narcotráfico y los violentos efectos colaterales que genera.

Los críticos afirman que la población civil queda expuesta al fuego cruzado de esta guerra sin fin y que los militares cometen abusos graves. Grupos defensores de derechos humanos, legisladores y analistas piden que se revisen los operativos.

En una llamada telefónica al canal CBT de Michoacán, un sujeto que se identificó como Servando Gómez Martínez, alias la Tuta,a quien el Gobierno identifica como el máximo mando de la organización criminal La Familia, cuestionó a la policía federal "porque ataca a nuestras familias, fabrica culpables y se lleva a gente inocente... hace lo indebido". "Queremos que no molesten a nuestras familias, que se dediquen a agarrarme a mí, a mis muchachos, todo el mundo sabe quiénes somos. Pido respeto para hijos, mujeres y padres; si nos respeten los vamos a respetar", dijo. Según la Tuta, el pacto evitaría las muertes, detenciones y tragedias innecesarias.

"Queremos paz y tranquilidad. Sabemos que somos un mal necesario (...) ¡Entiéndalo por favor! Esto nunca se va a acabar. El día que yo fallezca pondrán a otro en mi lugar y así se va a ir. Queremos llegar a un consenso, a un pacto nacional", pidió la Tuta.

17-VII-09, J. Ibarz, lavanguardia