USA demana a Espanya acollir a set víctimes de Guantánamo

Presionado por una opinión pública que no comparte su convicción de que "la existencia de Guantánamo ha creado más terroristas en el mundo de los que ha llegado a retener", Barack Obama empieza a pisar a fondo el acelerador para cumplir su promesa de vaciar la prisión antes del 22 de enero del 2010.

En una semana, ha liberado a nueve hombres en países como Chad, Iraq, Arabia Saudí o Bermudas, en este último caso a cuatro chinos uigures, una minoría musulmana. Estados Unidos ha renunciado a recolocar a este grupo en su territorio (pensó en llevarlos a Virginia), que varios países han rechazado para evitar problemas con Pekín. Finalmente, ha pactado con Palaos liberar allí a los trece uigures restantes.

Hoy Washington sellará un acuerdo con la UE que abre la puerta a la llegada a territorio comunitario de varias decenas de presos declarados "limpios y liberables", y espera que este hecho dé lugar a pactos similares con Canadá y Australia. Se trata de personas que EE. UU. no considera peligrosas y contra las que no hay cargos, pero que por "razones imperativas" no pueden volver a sus países, donde podrían ser torturadas o perseguidas.

Es el caso de los siete detenidos que EE. UU. querría recolocar en España, según han explicado a La Vanguardia sus abogados, aunque "no tienen lazos directos" con el país. Cuatro no quieren dar publicidad a sus casos por temor a que sus familias sufran represalias. También han pedido ser acogidos el argelino Ahmed Belbach, de 40 años, el azerbaiyano Pelad Sirajov y el tunecino Saleh Sassi. Los tres fueron detenidos de forma irregular, llevan más de siete años en Guantánamo y varios a la espera de un destino distinto a sus países para rehacer sus vidas. El primero de ellos, amenazado por los islamistas, tuvo la residencia británica, aunque Londres no se ha hecho cargo del caso. Tampoco Italia se ha interesado por Sassi, que vivió en Turín entre 1998 y el 2001.

Sus abogados, de la ONG británica Reprieve, han mantenido contactos informales con la oficina de derechos humanos del Ministerio de Exteriores. La petición formal de asistencia por parte del Gobierno de EE. UU. se producirá a finales de esta semana en Madrid. "Escucharemos y miraremos las peticiones que nos hace para responder siempre, en principio, de forma positiva, pero respetando nuestra legalidad interna y viendo caso por caso", explicó Miguel ÁngelMoratinos el sábado al anunciar la reunión con Dan Fried, representante especial para el cierre del penal.

Los Veintisiete darán hoy su visto bueno formal al acuerdo de cooperación tras renunciar a que Washington afirme por escrito que permitirá asentarse en suelo estadounidense a los detenidos que lo deseen. La Casa Blanca reiteró la semana pasada que no lo descarta, pero el debate interno no ha concluido. La presidencia checa organiza un anuncio conjunto con Obama por videoconferencia para el miércoles.

15-VI-09, B. Navarro, lavanguardia

El acuerdo que hoy suscriben la Unión Europea y Estados Unidos abre la puerta a que algunos presos de Guantánamo vivan en libertad en algún país europeo, pero la llave sigue en poder de los gobiernos. Se calcula que entre 40 y 60 presos reúnen las condiciones pactadas para ser acogidos, pero a diferencia de las liberaciones pactadas en tiempos de Bush con países como Yemen, la UE no se lo va a poner fácil.

El Gobierno alemán ha rechazado la pretensión de Estados Unidos de que aceptara a 17 chinos uigures, una minoría musulmana que cuenta con una gran colonia en Munich. También, según reveló el viernes la prensa, se ha negado a acoger a un preso tunecino y a otro sirio, en este caso por falta de información sobre los expedientes, uno de los aspectos más delicados de las negociaciones.

Según el acuerdo que hoy formalizarán ambas partes, "Estados Unidos compartirá con el Estado miembro en cuestión toda la información, confidencial y de otros tipos, sobre esa persona", para que tome una decisión informada y haga su propio análisis de seguridad. La negociación será bilateral, pero los países que pretendan acoger a ex detenidos deberán mantener al corriente al resto de los socios de la UE, que podrán pronunciarse al respecto pero no impedir que la acogida.

Los términos del acuerdo ya se pusieron en práctica en mayo, cuando Francia aceptó liberar en su territorio a Lakhdar Boumediene, de nacionalidad argelina, con quien ha pactado que no salga del país. El caso de Boumediene fue paradigmático, al haber obtenido del Tribunal Supremo el derecho de los presos de Guantánamo - juzgados por militares- a defenderse en tribunales civiles.

Con cuentagotas, los presos de la categoría "limpios y liberables" (cleared for release)esperan conocer la libertad. También ha abandonado Guantánamo el chadiano Mohamed el Gharani, detenido cuando tenía 14 años y devuelto la semana pasada a su país. Es la parte relativamente sencilla del cierre. La más difícil, qué hacer con los presos peligrosos que no se puede juzgar y que "siguen en guerra con EE. UU.".

15-VI-09, B. Navarro, lavanguardia