la nova doctrina de Hillary Clinton

Clinton dejó claro a los aliados el lugar prioritario que Afganistán, donde la Alianza libra su mayor operación exterior, ocupa en la nueva política exterior estadounidense. "Informó tanto como escuchó", aseguró el secretario general de la Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer. Washington quiere implicar también a los países vecinos, donantes y organismos oficiales en la planificación de una nueva estrategia política y militar en el país.

Clinton anunció la convocatoria de una conferencia, "una gran carpa", de acuerdo con la ONU, dedicada a elaborar una nueva estrategia política y militar. "Esperamos que Irán pueda ser invitado como país vecino de Afganistán", reveló. Estados Unidos dio así el primer paso en su prometido intento de reanudar el diálogo político con Teherán, un régimen al que no deja de calificar de amenaza por sus aspiraciones nucleares.

La secretaria de Estado expuso las bases de su nueva estrategia en Afganistán: implicar a los países vecinos, en especial Pakistán, aumentar los esfuerzos civiles y de desarrollo económico (capítulo en el que espera la cooperación de Europa) y trabajar más estrechamente con el pueblo afgano para buscar soluciones, también políticas. La música de la nueva política exterior estadounidense entra bien por el oído europeo: la noche anterior fue despedida con aplausos al final de la "cena transatlántica" celebrada con los ministros de la UE y la OTAN. Clinton no pidió explícitamente refuerzos militares o civiles para Afganistán, pero el vicepresidente Joe Biden volverá a Bruselas la próxima semana para tratar en la OTAN "posibles contribuciones", avisó después.

Todos los caminos de la nueva política exterior de EE. UU. pasan de alguna manera por el peligroso territorio de Afganistán. La próxima conferencia internacional para estabilizar el país centroasiático se organiza significativamente en suelo europeo y con la ONU, no con la OTAN. Da además la primera ocasión a la nueva Administración de tender la mano a Irán. Al mismo tiempo, su oferta de "poner a cero el contador" con Moscú permitirá negociar nuevas vías de tránsito hacia Afganistán. Washington está hablando incluso con China, a quien también se invitará, para que se implique por primera vez en la operación afgana.

6-III-09, B. Navarro, lavanguardia