que la prova de final de Primària sigui (independent i) vinculant

El Departament d´Educació acaba de anunciar su intención de poner una prueba a los alumnos cuando acaban primaria - sexto curso y una edad de 11 o 12 años- para conocer el nivel en algunas asignaturas antes de empezar la ESO. Es, sin duda, una medida interesante, aunque hay que lamentar que pierda buena parte de su fuerza cuando se anuncia que el resultado no tendrá carácter vinculante y que sólo será orientativo para conocer el nivel del alumno. Al Departament d´Educació hay que reconocerle una voluntad real de ser imaginativo a la hora de abordar las necesarias reformas que precisa el anquilosado sistema educativo existente en Catalunya. También, una voluntad, al menos hasta la fecha, de alcanzar acuerdos con el principal grupo de la oposición, Convergència i Unió, aun a costa de tener en contra a los sindicatos, Iniciativa y algunos sectores vinculados a Rosa Sensat. Evidentemente es positivo que en una materia tan crucial e importante para el progreso del país haya el mayor acuerdo posible y se apliquen sistemas que han dado un buen resultado en otros países. Sin embargo, a veces hay como un cierto miedo a dar pasos definitivos, y parece combinar mejor con la cultura del esfuerzo reclamada por el presidente de la Generalitat en el debate de política general que la prueba previa a entrar en la ESO fuera vinculante. Está absolutamente comprobado que la mejor manera de que sea considerada por profesores y alumnos una prueba académica relevante es que acabe teniendo alguna importancia. La necesidad de subir el nivel de la educación es tan importante que los tiempos de paños calientes pueden haber pasado.

2-X-08, J. Antich, lavanguardia