cal reformular radicalment el concepte de jubilació

Abogados, médicos, arquitectos y otros profesionales liberales están anticipando su jubilación estas semanas para poder compatibilizar el cobro de la pensión de jubilación de la Seguridad Social con el ejercicio de la actividad profesional libre. Esta opción, muy frecuente en estos colectivos de profesionales, se eliminará para quienes se jubilen a partir del próximo 1 de julio, cuando entre en vigor una orden del Ministerio de Trabajo que cambia de forma radical las perspectivas económicas de cerca de 500.000 profesionales: abogados, médicos, arquitectos, aparejadores, ingenieros civiles e industriales, gestores administrativos, químicos y péritos ingenieros técnicos, colectivos que tienen sus propias mutualidades de previsión social, que son alternativa al Régimen de Autónomos de la Seguridad Social (RETA).



"Cambian las reglas de juego a mitad del partido y dan un vuelco radical a las expectativas económicas de miles de profesionales que optaron por cotizar a la Seguridad Social, en lugar de hacerlo a su mutualidad, contando que podrían completar su pensión manteniendo algo de ejercicio libre cuando llegasen a la jubilación", lamenta Joan Bassas, abogado y miembro de la junta de gobierno de la Mutualidad de la Abogacía. Esta mutua, así como el Consejo General de la Abogacía y el consejo de colegios de médicos, entre otras entidades profesionales, ya han anunciado que recurrirán la nueva norma.



El problema, reconocen los profesionales, es que gran parte de quienes trabajan en régimen de autónomos cotizan por la base mínima, lo que sólo les garantiza el acceso a la pensión mínima de jubilación, situada ahora en 601 euros al mes. Estos profesionales, sin embargo, confiaban en seguir en ejercicio más allá de su retiro legal, reteniendo al menos una parte de su actividad profesional. "Un médico o un abogado con 65 años está en plena madurez intelectual y profesional: no tiene sentido que no pueda seguir viendo pacientes o dando asesoramiento legal", asegura Bassas. Para mantener la actividad privada habrán de retrasar su jubilación, pese a que con edades avanzadas difícilmente podrán mantener el nivel de actividad -y de ingresos- de cuando eran más jóvenes.



Esta reforma legal afecta también a quienes cotizan como trabajadores por cuenta ajena (situación muy frecuente entre el personal sanitario y, en el resto de profesiones, entre los profesores universitarios) y ejercen a la vez como profesionales liberales y, a su jubilación, como consultores, conferenciantes o asesores para la elaboración de dictámenes.

Fuentes de los colegios profesionales señalan que la reforma corre el riesgo de impulsar la economía sumergida: muchos profesionales tendrán la tentación de seguir ejerciendo sin facturar oficialmente, y haciendo que las demandas o informes que elaboren vayan firmados por otros compañeros de estudio o despacho.

Bassas señaló que las entidades que agrupan a los colectivos afectados han iniciado contactos con distintos grupos políticos para que presenten iniciativas parlamentarias para que deroguen esta norma. El grupo de CiU en el Congreso y el del PNV son los que se han mostrado ya dispuestos a hacerlo.

13-VI-11, R. Salvador, lavanguardia