les noves esquerres, víctimes de les velles

Podemos trata de impedir a toda costa que el cisma que vive en Madrid a cuenta de la alianza sorpresa entre Íñigo Errejón y Manuela Carmena se extienda como una mancha de aceite a otros territorios. Evitar nuevos incendios se ha convertido en la máxima a seguir, con especial atención a las ciudades que ya gobiernan y donde aspiran a repetir victoria.

Entre ellas, por supuesto, está Barcelona, donde finalmente la alcaldesa y líder de los comunes, Ada Colau, tendrá las manos libres para elaborar su lista a las municipales de mayo.

Los morados podrían presentarse solos, sin los comunes, en una decena de ciudades catalanas

 

La situación no estaba nada clara hace apenas dos meses. Las discrepancias entre Podem Catalunya y BComú sobre cómo encarar este proceso afloraron al mismo tiempo que surgía la crisis de la candidatura de Carmena. Mientras que Colau defendía hacer primarias para toda la confluencia, la dirección morada catalana aseguraba que serían los militantes de Podem los que elegirían a las personas que representarían al partido en las municipales de Barcelona, candidatos que Colau tendría que aceptar e incorporar, lo que le haría perder control sobre al menos una parte de su lista.

“Haremos primarias propias”, aseguraban en la dirección de Podem, que lidera Noelia Bail. La confluencia de la alcaldesa apostaba en cambio por convocar primarias de forma general, es decir, que los aspirantes, sea cual sea su partido de origen, se presenten bajo el paraguas de BComú.

La situación no estaba nada clara hace apenas dos meses

 

Y es lo que finalmente ocurrirá. Podem ha renunciado a las primarias propias en la capital catalana, una decisión en la que ha intervenido la dirección estatal, que se ha ocupado de gestionar este asunto para llevarlo a buen puerto.

La dirección de Podemos recuerda además que sus estatutos permiten concurrir directamente en los procesos de primarias de las confluencias.

El liderazgo hasta ahora indiscutible de Ada Colau en Barcelona ha facilitado que se llegue a un acuerdo de forma relativamente rápida.

Ahora bien, no ocurre lo mismo en otras ciudades catalanas, en las que Podem y Catalunya en Comú no han llegado aún a un pacto y corren el riesgo de presentarse en candidaturas separadas, compitiendo además entre ellas.

Es el caso de una decena de localidades, como Sabadell (aquí Podemos se ha aliado con EUiA y se confrontará con los comunes), Mataró, Tarragona, Sant Joan Despí, Montornés, Mollet del Vallès o El Vendrell, donde las negociaciones se han complicado y la coalición entre ambas formaciones pende sólo de un hilo.

En las filas de Podem hay quien achaca el desencuentro a las agrupaciones locales de ICV, partido que cuenta con una mayor implantación territorial y que, según los morados intenta liderar las candidaturas en estas ciudades, ahora bajo la marca de Catalunya en Comú, algo que los ecosocialistas niegan.

Pero los comunes también pueden fracturarse en otros municipios debido a los desacuerdos entre la dirección y las corrientes más soberanistas del partido, cada vez más críticos con el rumbo adoptado por Colau. Así, en ciudades como Girona y Badalona, la cuarta ciudad de Catalunya, donde el ala más independentista de la formación prefiere concurrir bajo el paraguas de la CUP.

21-I-19, lavanguardia